Una reflexión en torno a la enseñanza de Español A: Literatura
En nuestra primera clase de “Español A: Literatura” de IB nos encontramos con un grupo numeroso, curioso y ávido de conocimiento que por momentos, aclamaba certezas y en otros, disfrutaba del relativismo. ¿Qué es literatura?, preguntamos. Varios alumnos, inmediatamente, se preguntaron qué es verdad y qué es real, ¿será aquello que “entra por los sentidos”? Otros, dijeron que podía asociarse con lo que pensamos y no decimos. Prepararlos para un examen internacional no es correrlos por resultados a cualquier precio, sino que honestamente encarnen el espíritu de lo literario en todas sus dimensiones: un salirse de la raya (Pettit), un reservorio de la memoria (Freire), una imposición subjetiva ante la descomposición del mundo (De Beauvoir), un salvavidas para empezar de nuevo (Monte), un sueño dirigido (Borges), una eternidad (Bioy Casares).
Ojalá cada estudiante, desde su experiencia lectora, pueda “tocar” al menos una de estas premisas y aún más: nos desafíe a proponer las nuevas.